Hay quien considera que la multiculturalidad tardó en llegar a Zaragoza más que a otras ciudades como Madrid o Barcelona. Pero la historia bimilenaria de Zaragoza nos recuerda que la nuestra, siempre ha sido una ciudad de encuentro entre culturas.
En este contexto multicultural, y más concretamente en el barrio de Las Fuentes, ha surgido un proyecto artístico más que interesante de la mano de las asociaciones Alfan Árabe Mogador y Compagnia Cronopis.
Alfan Árabe Mogador, con Sabir Hadi a la cabeza, lleva tiempo establecida en Zaragoza. Sabir es un artista conocido sobre todo por su trabajo con material reciclado, cuyas obras han sido expuestas en numerosas galerías y espacios de la ciudad. Entre sus últimos trabajos se encuentran el pasacalles para la Carrera del Gancho de 2011, que bajo el título “Los hombres VHS” nos presentó una caótica sociedad del futuro.
Este proyecto artístico entre ambas asociaciones se materializa en el espectáculo Henna, que se estrenará en la XXIII edición del Festival Pirineos Sur. “Henna es algo más que un pasacalles. Es un espectáculo itinerante de fusión de artes escénicas”, destaca Nacho Sánchez, coreógrafo del mismo.
La idea original surgió del artista Sabir Hadi, quien presentó al festival Pirineos Sur una propuesta sobre las tribus Tuareg. Tras escuchar la propuesta de Nacho y Emanuela sobre cómo incorporar la danza y otras artes escénicas al espectáculo, Sabir tuvo claro cómo se llamaría. “El tema de Pirineos Sur 2014 es la mujer, así que pensé que Henna (un tinte natural con el que las mujeres de Oriente acostumbran a decorar sus pies y manos) era un nombre que encajaba perfectamente”
Por su parte, Compagnia Cronopis es una asociación artística cultural creada con el objetivo de “hacer el arte accesible para todos fomentando y difundiendo la multiculturalidad en general en todos los ámbitos sociales”. Sus responsables, Nacho Sánchez y Emanuela Luciano, llevan un año establecidos en Zaragoza.
Si ahondamos en el concepto de este espectáculo nos encontramos con una exaltación a la mujer como símbolo de fertilidad y fecundidad. “Henna es un mensaje de vida, un homenaje a la mujer y a la Madre Tierra cargado de alegría, magia y símbolos relacionados con la feminidad”.
Para materializar ese concepto, el espectáculo posee una escenografía propia del desierto encabezada por la impresionante marioneta de un camello de tres jorobas y tres metros de altura hecha por Sabir Hadi. “El camello está hecho de sacos de café y harina reciclados además de distintos tipos de papel y cartón. Fueron tres meses de intenso trabajo”, destaca su autor.
Tras el camello, movido por la precisión de movimientos de dos zancudos, aparece la figura del pastor. “El pastor es un hombre arena que conduce al camello y a todos los habitantes del desierto”, comenta Emanuela Luciano, directora artística de Henna.
Tras él, un grupo de bailarines ataviados con turbantes y cuyos cuerpos estarán cubiertos de body painting obra de la maquilladora Isabel Gálvez, seguidos del dj Gali Matías que estará pinchando música a base de ritmos especialmente creados para el espectáculo y entre los que no faltarán por supuesto, los sonidos del desierto.
La dinámica de Henna es la de un pasacalles, por lo que tras la interpretación del ritual y el recorrido, finaliza en una performance final. “El cierre del espectáculo representa la llegada de un pueblo al templo, por lo que allí podrá verse será una gran exaltación, un estallido de emociones”, nos desvela Emanuela.
Pero hay algo más que cabe destacar en Henna que todo el mundo debe saber. Se trata del origen de los bailarines. Todos han sido formados en el marco de una residencia de creación, especialmente fundada con este objetivo y llevada a cabo de forma conjunta por la Compagnia Cronopis y la Asociación Alfan Árabe Mogador. Personas que han entrado a formar parte de esta asociación movidos por el deseo de formarse en diferentes disciplinas artísticas, y que han visto, en esta oportunidad de poder salir a escena, un sueño cumplido que muchos estudiantes de danza o teatro tardan años en cumplir.
Dicho esto son muchos los argumentos para acudir a Pirineos Sur el próximo 27 de julio. Quienes tengan una buena excusa para no hacerlo pueden empezar a cruzar los dedos. Si todo va bien, en octubre tendrán una nueva oportunidad de disfrutar de Henna en Zaragoza.
